lunes, 20 de junio de 2016

Algún apunte más sobre coleccionismo

Con acentuado interés asistí el pasado 8 de junio en la facultad de Biblioteconomía de Barcelona a una tarde dedicada a teorizar sobre ex-libris y coleccionismo literario. El tema de mi colección de húngaros da de sí no solo para juntarlos y leerlos sino para teorizar sobre la misma, luego no podía dejar de comparecer a un foro académico sobre la materia que viene a ser la ocupación fundamental de mi vida, o al menos en la que se me ha reconocido públicamente algún mérito en la madurez. A la postre el lector coleccionista deja de ser un consumidor de cultura y de alguna forma se convierte también en creador, amén de que probablemente tantos anónimos lectores a pesar de ser sólo lectores hayan consumido como tales muchas más lecturas que muchos escritores.
A las conferencias invité y me acompañó la encargada cultural del Consulado General de Hungría, la filóloga hispánica, Edina Lovass.
Me esperaba más del ponente de coleccionismo, era la última charla y no hubo tiempo para yo preguntar aunque no dejé de abordarle tras su exposición, y no me supo responder. De entrada él representaba a la Asociación de Bibliófilos de Barcelona y su interés se centra en el libro como aisladamente valioso por sí mismo, no tanto por su contenido sino por su valor editorial por artístico, raro o antiguo .En cambio para el coleccionista literario no bibliófilo lo significativo de su colección es el tema y por tanto el conjunto. El valor no será aisladamente de un ejemplar, el valor de un volumen podrá ser irrisorio, su valor será formar parte de un conjunto. Este aspecto no se lo comenté al ponente porque vi clara la diferencia, en suma es  la diferencia entre el coleccionista bibliófilo  y el coleccionista bibliógrafo []yo] Lo que sí quise abordar fue lo que considero caracteres esenciales para el coleccionista en general, el literario en particular y creo también para el coleccionista bibliófilo.

Ya abordé el tema en la exposición, luego publicada que en octubre de 2012 hice en la Universidad Complutense, pero he de insistir tras seguir pensando en ello: 1.-Acotamiento físico. Una colección no es un depósito, requiere un grado de aprehensibilidad por parte de su titular, tener parece algo más amplio que coleccionar, coleccionar implica abarcar físicamente, bien porque el objeto permita su dominio físico o corpóreo , uno no colecciona bosques, tiene bosques. O bien porque su número de ejemplares permita esa sostenibilidad física acorde a un individuo. Doscientos mil ejemplares en libros no es una colección , es un depósito o una biblioteca. Si la guarda de lo coleccionado exige varias naves de almacén, la colección ha sobrepasado sus límites razonables. Esto también supone la proximidad o cercanía del conjunto, tener una colección en otro continente no es una colección es en todo caso una propiedad.  Y ello conduce al otro requisito esencial derivado del anterior y vicerversa, 2.- Acotamiento intelectual. La verdadera colección exige el conocimiento de la misma por su titular, en comunión íntima y cotidiana con sus objetos coleccionados, que permite abarcar su contenido y refrescarlo por estar volviendo a ella con asiduidad, lo cual no implica que no esté terminada, ya que aunque la dé uno por cerrada o simplemente esté completada, no quiere decirse que no la maneje .Por eso volviendo a lo anterior doscientos mil libros serían poco manejables intelectualmente por el titular de la colección.
Así la  vuelta a sus elementos para refrescar su contenido o mera existencia resulta imprescindible.


colección Zilahy
El fin de semana anterior monté una ampliación de la biblioteca y este fin de semana necesitando ampliar el espacio para los húngaros y dejando huecos en los estantes para hacer sitio a nuevos y futuros libros he tenido que reordenar toda la colección después de tiempo, quería que estuviese toda junta sin solución de continuidad pero no podía ser y lo más oportuno ha sido separar a Zilahy en estantería ad hoc e individualizada para él. Así al limpiar, correr todos los libros y dejar huecos he visto en la parte más alta, y por tanto más inaccesible que tenía una copia de un libro que hice en 2004 y que creo que nunca volví a intentar conseguirlo, e inmediatamente me he lanzado a Iberlibro y lo he encontrado en París por 8 euros y 8,5 de envío. El coleccionista ha de estar encima no tanto por limpieza sino para su abarcamiento y control intelectual de lo que tiene ,y en este caso para actualizarlo El repaso de los ejemplares ha supuesto así que la copia de  Janos Berecz, "1956, Contrarrevolución en Hungría" Tesys 1988, sea completada con el original que he encontrado en París como "Qué es la contrarrevoluvción apacible?" editorial Camilo Cienfuegos 1974.
Los húngaros limpiados, espaciados y reordenados


miércoles, 1 de junio de 2016

Literatura de oro de Un hombre de oro de Jokai.

Literatura de oro de Un hombre de oro de Jokai. (Az arany ember )
El formato de letra chica y apelmazada hace tiempo que ya no me espanta de leer, antes sí; aunque creo que la velocidad de lectura más apacible y para tener sensación de gratificante avance es de 20 páginas por hora, que en formatos de letra muy reducida no se logra.
Estos últimos meses a la caza del libro húngaro-argentino topé con una edición de allá de 1908 de Un hombre de oro de Jokai, cuando aquí la primera edición también en dos volúmenes era de esa época, 1907. Desgraciadamente el librero de AVES DEL PARAISO de Buenos Aires me ha contestado que no hace envíos fuera del país.










No podía contentarme para tan buena novela quedarme con mi rústico ejemplar de editorial Sopena de 1972 y tenía que tener el original de 1907, si bien antes le pregunté al librero de MENOSDIEZ en Madrid por la traducción. Como mi ejemplar no tenía el nombre del traductor tenía que cotejarla con la de Pedro Umbert para lo que me mandó la primera página, por lo que comprobé que era la misma traducción, aún así he encargado ayer el libro, por 22 euros es ya una antigüedad, cuando en Alcaná está a más de 80 euros.. Me queda por verificar si las dos ediciones americanas son traducción diferente, y así lo he preguntado en Argentina para la edición de 1908 que de momento no puedo conseguir. y en Valencia para la edición cubana de 1979, que si es distinta me quedaré.
La de 1908 argentina no consta el traductor según me dicen  y no voy a molestar más pidiendo una copia de la primera página. Y la edición cubana la librera [2 de junio] me ha ido leyendo por teléfono la primera página y es salvo alguna palabra la misma traducción de 1907, luego es de presumir que la edición argentina sea también la del tal Pedro Umbert.



La Habana 1979





2 de junio de 2016 ¿quién era Pedro Umbert?
En dos días la librería de Madrid Menosdiez  de la calle Espejo 5 ha colocado sobre la mesa de mi despacho en paquete postal los dos volúmenes de Un hombre de oro publicado en 1907 . Aunque es la misma versión que la de Sopena, sólo por el prologo del traductor era apetecible la adquisición, y por supuesto por la antigüedad que supone ya 1907. El lunes 30 la librería me informó sobre la traducción y el 31 formalicé el pedido. Pero ¿quién era ese traductor?, ¿quién era Pedro Umbert?
Firma el prologo en Barcelona 1906 y por sus otras traducciones y libros publicados de los que era autor parecía vinculado a la editorial Imprenta de Henrich y Cía. Editores de la calle Corcega 348 y por tanto a esta ciudad.
En la Biblioteca Nacional hay 34 registros de Umbert entre prologuista, ensayista, viajero o narrador. Iberlibro oferta hoy 126 volúmenes todos ellos en España y alguno de no poca cotización, 180 euros:            VIAJES Y AVENTURAS. CUADROS VIVOS DE EXCURSIONES, DE CAZA, DE SPORT Pedro Umbert (compilador) Editorial: I. de Henrich y Comp., en Comandita, Barcelona, 1910 . Y en Uniliber hoy hay 94 ofertas. Pero a lo que a mi interés concierne sobre él es la duda mas que razonable de que la obra no se ha traducido del húngaro, primero porque ni lo dice ni siquiera reseña el título original en húngaro,[Az arany ember] y segundo porque de su quehacer traductor las reseñas que cita la Biblioteca Nacional son de autores ingleses y de alguno francés. Queda pues en  el misterio  la lengua de la que tradujo Un hombre de oro; refrito que se abstiene de reconocer a pesar del prologo, por lo que no es de extrañar que en la edición de editorial Sopena  se omita su nombre, por supuesto el título original  y se utilice sin mas  esa traducción.


23 de junio 2016
 He estado tentado de ampliar de alguna forma la colección un poco bibliofilamente  pudiendo sin mucho ahínco añadir títulos publicados en cualquier lengua pero del siglo XIX, lo cual acota  los autores a Jokai, de hecho en el verano de 2011 ya adquirí en Hungría a modo de suvenir alguna obra en húngaro, entre ellos dos de Jokai, uno de 1895 y otro de 1910. Mi hijo me ha hecho desistir de la pretensión, pero en cambio si que parece pertinente  el primer húngaro en español, El castellano convertido, Jokai 1887, tenerlo también en otras lenguas lo cual es también muy acotado .
"Az új földesür", se publicó en Budapest en 1863.
Con el título de " The new landlord", y con traducción de Arthur John Patterson se publicó en Londres[Macmillan 1868]. Al día de hoy el libro sólo se encuentra en facsímil bajo pedido y parcialmente es descargable en red.
Al alemán se virtió en 1876  "Der neue gutsherr", en traducción  de Andreas Oplatka. Una edición de 1980 he solicitado hoy mismo.No he encontrado más antigua.
La versión francesa fue publicada en 1910, con el título "Le nouveau seigneur" traducida del alemán por H. Heinecke en Hachette y en 1960 con el mismo título  se publicó traducida del húngaro por Antal Radvanszky, que la tengo pedida en una librería de París desde principio de mes. Lo significativo es que esta segunda edición es más genuina que la primera que proviene de la versión alemana. Hubo también una versión en catalán la de 1893 en La Renaixensa ,con el título " L´amo nou" y que desgraciadamente al igual que la versión española sólo tengo en fotocopia.


5 de julio de 2016
Pasado un mes desde que hice el pedido de "Le nouveau seigneur" he reclamado a la librería antes de reclamar a Iberlibro, mi mensaje ha sido éste:
                            " Bonsoir. Après un mois, le livre n'a pas arrivé . merci"
Y la contestación de hoy ésta:
Bonjour,vraiement désolé, il n’était pas parti… Il part demain sans faute !
Bien cordialement,
Félix Pettit
.
Librairie Pettit
43 rue Violet
75015 Paris - France
Tel : 0033 6 81 13 99 38
La verdad es que ardo en deseos de tener la versión francesa, para ver si a ésta se parece más la española o la catalana, ya que estas dos no se parecen en nada , y pasados los primeros capítulos parecen obras distintas. De todas formas la versión catalana ,de 1893 ,aún con el mismo título que en francés, no puede haber sido traducida de la que me llegará, ya que es versión del original húngaro de 1960. La edición alemana en un formato chiquito y agradable me llegó el 29 de junio , y tiene el encanto añadido de haber sido desafectada de una biblioteca pública [Sömmerda, THÜR Germany]











13 de julio de 2016
Finalmente llegó la preciosa edición francesa de El castellano convertido, que comparada con la catalana de L´amo nou resulta la misma que aquella ; el problema es que la catalana es anterior, que es de 1893, y la francesa de 1960 se tradujo del húngaro entonces ya que la primera en francés lo fue del alemán la versión catalana o se tradujo del alemán o del húngaro, o del francés que lo había sido del alemán, o del inglés, pero no del español.
 
 




23 de julio de 2016
Ya tengo en mi poder el ejemplar cubano de Un hombre de oro, que mi hermana me recogió en Valencia y dejó en casa de mi madre, y hoy mi hijo me ha traído de Valencia. Tenía ganas de cotejarlo con mis dos ediciones españolas  y comprobar si al menos en Cuba se había traducido del húngaro y arrojaba pues un texto distinto al editado en España de Pedro Umbert. Fiasco, la traducción es calcada de las ediciones españolas pero con una agravante no menor, esta edición cubana corta donde le viene en gana y llega solo hasta el capítulo 29 El dulce hogar ,con una perfecta literalidad, cuando las ediciones españolas terminan en el capítulo 48. Lo primero que pensé es que en Cuba se contentaron con los capítulos del Tomo I de 1907, pero tampoco, pues el 29 es del Tomo II. Luego  terminaron  la novela donde les vino de gusto o se quedaron sin papel.